El aceite de Oliva Virgen Extra es una parte tan importante en tu alimentación que requiere que sea empleado con pleno conocimiento sobre lo que estás consumiendo. No en vano, es el aceite de mayor calidad del mercado y por este motivo necesitas conocer cuáles son sus principales características.
Para que de esta manera, no puede ser confundido con otros aceites que no presentan algunas de sus propiedades. Dentro de los aceites de oliva puedes encontrar diferentes selecciones y dentro de ellas el extra virgen es una de las que ofrecen más calidad. No obstante, debes tener un especial cuidado porque pueden venderte extra virgen cuando realmente no lo es. Por este motivo es tan importante que puedas reconocerlo para satisfacer tus necesidades en la alimentación y para fomentar una correcta nutrición.
Porque en efecto, si por algo se distingue un buen aceite de oliva extra virgen es por su elevada calidad nutricional y que es aportada en todos los casos. No tendrás problemas para identificarlo porque su aroma es inconfundible ya que evoca a algunos elementos de la naturaleza (flores, frutas, etc.). Pero con un rasgo que llama la atención ya que presenta un tono amargo en cuanto a su sabor. Será una de las diferencias más relevantes con respecto al aceite puro de oliva.
También hay otras manifestaciones que delatan que estás ante un extra virgen y no ante otros aceites. Como por ejemplo, en su elaboración ya que en este caso es originado desde el primer prensado de las olivas. Para que este proceso se desarrolle correctamente es necesario que las olivas estén muy maduras y por supuesto no estén dañadas. La categoría extra virgen, por otra parte, presenta un nivel de acidez menor al de otros aceites y que se constituirá en una garantía de su mayor calidad. Es reconocible porque no presenta más del 0,80 % de acidez.
En cualquier caso, si no deseas tener ninguna duda sobre su reconocimiento dispones de un pequeño truco que nunca falla en estos casos. Consiste en que debe producir un cierto picor en tu garganta al digerirlo. De cumplirse este escenario, no tendrás ninguna duda de que estás ante un aceite de oliva extra virgen y no otros de similares características. Otra de las particularidades más notables que pueden delatar su condición es la que se refiere a que no utiliza productos químicos en ningún escenario y que pueda empeorar los nutrientes del aceite.